Un poco de color dentro de la oscuridad

Mis queridos amigos, ¿alguna les ha pasado que el mundo se gira y te quedas colocado del revés? Te cuesta trabajo respirar, piensas que como la ley de la gravedad se ponga muy pesada, te vas a hacer mucha pupa. Y además, intentas agarrarte a lo que sea con uñas y dientes. Parece que alguien se ha sentado sobre tu pecho y además, te está tapando la boca y la nariz. Y sientes que de un momento a otro vas a explotar. 

Esta es la sensación que llevo yo viviendo durante varias semanas por un tema que ahora prefiero no mencionar; baste decir que es un tema de salud bastante serio, en una persona a la que quiero muchísimo. 

Pero claro, las cosas no suelen venir solas. Les gusta venir acompañadas. Así que por si fuéramos pocos, parió la abuela, como se suele decir. 

Para acompañar a esta extraña situación, que ya me hacía sentir así, qué mejor complemento que una pandemia. 

Y es que las pandemias son lo más. 

Esas sí que ponen tu mundo patas arriba. 

Así que de no tener tiempo para nada, he pasado a tener algo más de tiempo, que tampoco mucho, la verdad... 

Pero para lo que sí que hay que sacar tiempo, aunque sea de debajo de un cactus, es para los más peques, o para aquellos que no entienden lo que está pasando, pero que saben que no pueden salir de casa, y ello les agobia de forma considerable. 

Así que nada amigos. 

Hoy os propongo, teñir con un poco de color, esta oscuridad. 

En mi, lo normal, sería escribir como una loca. Pero me temo que mis emociones están tan dislocadas que me cuesta mucho hacerlo. Leer que es mi gran pasión, lo veo más factible. Aunque tampoco me queda mucho tiempo. Mi vida es bastante intensa desde hace unas semanas. 

Pero... he encontrado algo para poner esa nota de color. Y es hacer el ganso. Sí, sí. Así, como suena. Se me da de maravilla hacer el ganso, y cuando además te incitan a ello, pues ya está. Hay poco para resistir. Así que nada... aquí comparto algunas gansadas con vosotros, y ya me comentais que tal lleváis estos días de confinamiento, y... como ponéis color a vuestros días. 

Gansada de ayer, 15 de marzo

Mi hermano Juan se convirtió en marciano y yo en pitufa. Aquí estamos, dandonos la mano, je je. Hicimos un viaje interestelar magnífico y después, viajamos a los pequeños mundos azules. Nos pusimos de pena, pero nos lo pasamos bastante bien...

Eso sí, para la próxima me pido ser marciana. Ser pitufa es divertido, pero no veas como mola el traje marciano.

Gansada de hoy, 16 de marzo

Hoy nos ha tocado volar libres por el campo, pasear entre los árboles, surcar los cielos y regentar un castillo. 

Hemos sido mariposas, tortuga, avión, pájaro y rey...

Lo sé, la papiroflexia no es lo nuestro. La pobre tortuga parece sufrir artrosis. 

Y por último, amigos míos... tachán, tachán... 

Gansada prevista para mañana...

Mañana toca ir a la caza y captura de los calcetines perdidos. ¿Dónde se esconden esos calcetines que no tienen compañeros? ¿Se los comió la lavadora? ¿Quizás se perdieron en la subida hasta la azotea? Puede que alguno saliese volando o se creyese flor y se enganchara en alguna maceta. O tal vez... hay un duende travieso que se los lleva para hacer un bonito edredón de colores...

No sé amigos, mañana lo descubriré...

¡Mucho ánimo a todos!

Aprovecho, para dar las gracias a todos esos profesionales que están arriesgando su vida por ayudarnos a salvar las nuestras. Y también, a tantas personas que no pueden quedarse en casa, y que han de afrontar estos días trabajando con el consiguiente riesgo para ellos y sus familias. 

Tambíen tengo en el corazón a todos aquellos que no pueden abrir sus negocios en estos días. 

O aquellos que no tienen un techo bajo el que quedarse.

Intentar frenar el coronavirus es una tarea de todos. A pesar de ello, hay personas extraordinarias que están ayudando de forma desinteresada y con muchas opciones diferentes.

Aplausos de balcón a las ocho.

Canciones que compartir a través de las ventanas.

Historias que vuelan libres.

Solo espero que entre todos lo consigamos, y esto pase a ser una mala pesadilla, de aquí, a no demasiado tiempo.