Ronroneos, de Óscar Henández Campano

Tomar un libro en tus manos y que el resto del mundo desaparezca. Comenzar a leer una historia y vivirla. Párrafo a párrafo y letra a letra, sentir que estás dentro de ella, percibir los olores, el tacto, y hasta el gusto. Reír como si no hubiese un mañana, o llorar porque la emoción te embarga, y porque los sentimientos están expuestos a la desnudez de lo evidente. 


No todos los escritores tienen este don. No todos los escritores son capaces de hacer que abras un libro, y que este libro despliegue sus hojas para abrazarte. Que te sientas tan cómoda en su regazo, que olvides que hay más además de la lectura.

Óscar Hérnandez Campano es uno de esos escritores. 

De este autor que yo tengo entre mis favoritos, podréis encontrar varias reseñas en mi blog. 

Nuestra andadura juntos comenzó con un viaje; "El viaje de Marcos" . Ahí me di cuenta de que no quería soltarme de su mano. 
"Cuando duermen los grillos" me cautivó aún más. En este caso, y al igual que el libro que hoy os traigo, se trataba de una recopilación de relatos. Pero el no va más fue cuando ambos compartimos secretos... "El guardián de los secretos" es para mí su ópera prima. O lo era, ahora albergo dudas, pues "Ronroneos" ha arrancado de mí más de un maullido. 

El ronroneo de un gato produce un efecto balsámico sobre el alma humana. Los relatos que conforman esta antología aspiran a conseguir, a través de su prosa cuidada y colmada de sensibilidad, el mismo efecto. Gato Cooper, Miranda, Rocky, León o Reina son algunos de los protagonistas de las historias que conforman "Ronroneos", el libro más especial de Óscar Hernández Campano.

Al compás del elegante caminar de los mininos visitaremos desde la convulsa Europa de los años treinta hasta una nave espacial en la que un gato asistirá a hechos extraordinarios, pasando por la lucha de una activista para salvar un refugio felino amenazado por una maquiavélica concejala.

Ronroneos de siete felinos diferentes. Siete relatos, como las siete vidas que tiene un gato. Y bueno amigos, para mí, siete deleites. 

175 páginas, donde unos protagonistas muy mininos toman relevancia. Cada relato acompañado por una preciosa ilustración de Ana H. Reyero, y editado de manos de la editorial Flores Raras. 

Mi primer maullido fue junto a "Reina". Por cierto, con ella me ocurrió una anécdota que tiene su ovillo de hilo. Aquí esta servidora, sentada en la consulta del dentista. Acababa de recoger el libro de la papelería, ya que lo solicité directamente con el ISBN. No podía esperar la lectura. Lo saqué de la bolsita que lo contenía y allí mismo, entre música suave, caras nerviosas y el fantasma del "Qué te harán" apretándome las sienes... comencé su lectura. 
Justo cuando terminaba el relato, la enfermera salía a la sala de espera para avisar de que era mi turno. Levanté la mirada, los ojos nublados de lágrimas. La joven me miró extrañada. He ido tantas veces a esa consulta que están pensando regalarme una bata... 
Apenada me colocó una mano en el hombro. "¿Estás nerviosa? Yo le enseñé el libro... "Estoy leyendo"... 

En fin, cosas que le pasan a una sentimentaloide como yo. Pero continúo. Emotiva fue "Reina", pero tras ella llegó el "Gato Cooper"; y éste señores, me hizo llorar, pero de risa. 

Con "La concejala matagatos" me puse nerviosa, salté en la silla, me mordí las uñas, e hice un taconeado intenso. Intriga y adrenalina a tope, que se suavizó con "Gato encerrado", del que muchos humanos deberíamos aprender. 

Ficción intergaláctica con "Raza Universal"; y una ternura infinita con esa preciosa gata que tenía una afición muy particular. Me refiero a "La gata que coleccionaba calzoncillos". 

Pero para mí, la obra maestra de Ronroneos... "El increíble periplo del gato León", donde nuestro querido amigo gatuno aprenderá de relaciones a través de personajes algo peculiares. Por citar solo a algunos de ellos... Manuel Azaña, Franco, Hitler, Orson Wells... Un final apoteósico, para un libro magnífico. 

Lo cierto es que este autor me ha demostrado con creces que es un maestro de la sensibilidad y el tacto sin dejar de afrontar temas que son delicados como pueden ser nuestros miedos, inseguridades, o los propios asuntos de Estado. Este autor tiene la habilidad de trasladarte en el tiempo y el lugar. De hacer que veas y sientas lo que quiere mostrarte, y además, todo ello con sencillez. No tiene miedo a nada. Igual escribe sobre política, guerras civiles, soledad, abandono, pasiones, erotismo, miedos ocultos... que nos traslada a un universo paralelo. 

Quiero resaltar también la maravillosa labor de Ana H. Reyero. Sus ilustraciones son sencillas y hermosas a la par, y le han dado a este libro un toque muy especial. 

Una vez más, gracias Óscar, por regalarnos una obra literaria de gran magnitud. Espero con ansiedad la siguiente, me da igual que sean relatos, novela, o historia juvenil. En casa siempre hay un hueco para tus libros. 

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¡Y a disfrutar de la lectura !