La vida es como un puzzle, donde pieza a pieza, va encajando tu existencia. A veces, esas piezas se unen con facilidad, mientras otras, todo te parece igual y no encuentras la pieza que necesitas.
Miras por la ventana, y piensas... mañana. Mañana aparecerá, cuando el sueño haya aligerado el peso que hoy no me deja buscar. Cuando la mañana llegue con su caricia suave de promesa de nuevo día.
A través del cristal percibes el movimiento de las ramas de los árboles que te invitan a salir. Ríes mientras te parece que una de esas ramas te hace indicación de acercarte como si fuese un dedo que te atrae. Sobre ellas, unos pájaros revolotean piando tu nombre y piensas que has tomado demasiado café; o por el contrario, muy poco, y aun sigues dormida.
Así que te levantas, te lavas la cara, aunque no te peinas, pues ese look despeinado forma parte de tí. Abres la puerta y sales, viendo desde el exterior tu vaso de café lleno al lado de las pequeñas piezas de cartón que esperan tu llegada. Y miras hacia el árbol que antes te llamaba...
Se mueve una ligera brisa, el sol más que calentar, acaricia. Los pájaros deciden volar a otro lado, pero las risas de alguien cercano se posan sobre tu pecho. Inhalas sensación de libertad y piensas... "Estaba aquí". La pieza que faltaba... "estaba aquí". Al fin puedo ver el mundo desde el otro lado de la ventana...
Margarita, me encanta tu relato, amiga. A veces es necesario salir de nosotros mismos para completar el puzle de vida. La naturaleza nos llama y nos quiere alegres, libres y fuertes. El espíritu agradece que miremos el mundo desde otras perspectivas para enriquecerse. Esa pieza que no encontramos está cerca, sólo es cuestión de escuchar y sentir en profundidad.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo por tu creatividad, amiga.
Hola Mª Jesús, muchísimas gracias por tus bellas palabras. Esa pieza que nos falta está cerca, muy cerca, maravillosamente cerca...
EliminarMuchos besos cariño :D
Me encanta el relato, me parece precioso *-*
ResponderEliminarMuchas gracias por compartirlo
Besos ♥
Hola Naya, muchisimas gracias cariño. Besos :D
EliminarPero qué bien escribes, Margarita. Y qué bien que yo pueda leerlo...
ResponderEliminarTe mando besos.
¡Holaaaa! Muchisimas gracias. Y yo leerte a tí. ¡Besos! :D
EliminarEs una buena metáfora de la vida, la de ir encajando piezas. Un texto precioso.
ResponderEliminarMuchos besos.
Hola Rocío. Muchisimas gracias, lo cierto es que la vida es así para mí, encajar piezas. Solo que aveces nos tocan piezas bonitas y otras no tanto, pero al fin y al cabo, son las piezas que tenemos. Besos :D
EliminarUn relato precioso. Da gusto leerte. Las piezas del puzzle de nuestra vida tarde o temprano terminan encajando, nos guste o no, y es interesante ver la vida a través de las dos posiciones de la ventana.
ResponderEliminarUn beso muy grande
Hola Rita, muchisimas gracias cariño. Así lo veo. A veces estamos en un lado de la ventana, otras en el otro, pero siempre somos nosotros los presentes. Muchos besos :D
EliminarA veces tenemos la solución ante nuestras narices y somos incapaces de verlo. Me alegra comprobar que en tu historia esa persona por fin abrió los ojos y dio el paso hacia su libertad.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Rebeca, muchisimas gracias. A veces tenemos en la mano una pieza y la colocamos de una manera, de otra, que no encaja... y quizás solo haya que pararse y mirar un poco de lejos para ver la solución. Besos :D
EliminarHola, Margarita!!! Preciosa reflexión y muy muy cierto, me encanta!!!
ResponderEliminarMuchos besitos :)
¡Hola Soley! Muchisimas gracias. ¡Besos! :D
EliminarHola, un texto muy bonito, gracias por compartirlo con nosotros.
ResponderEliminarBesos desde Promesas de Amor, nos leemos.
Hola Flor de Cereza, muchisimas gracias cariño . Besos :D
EliminarComparto tu sensación. Un beso
ResponderEliminarHola Susana. Muchas gracias. Besos :D
EliminarMuy real, gracias por el relato ha sido genial
ResponderEliminarbesotes
Hola Laura, muchisimas gracias cariño. Besos :D
EliminarMe ha encantado leerte, me ha dado mucha tranquilidad. Un beso.
ResponderEliminarGracias por tu reflexiones, es un gustazo leerte, Margarita.
ResponderEliminarBesos.
¡¡Al fin Margarita!!
ResponderEliminarAl fin ha llegado un poco de luz, por aquí,Prov. de Buenos Aires, seguimos esperando.
mariarosa
Como siempre muy motivador, y muy necesario tu texto en los tiempos que corren! Un beso grande y gracias por pasar por mi blog siempre!
ResponderEliminar¡Hola Margarita!
ResponderEliminarJo, qué bonito, me ha encantado leerte. La verdad que cada vez que vengo a tu blog salgo con una sonrisa :). Además, me encantan tus reflexiones.
Un beso.
Muy bonito el relato de hoy ! 👏👏👏 Que tengas feliz semana! 🌈🌈🌈
ResponderEliminarLindo y reflexivo texto amiga, me voy pensando no sin antes dejarte un abrazo y mis saludos. Cuídate.
ResponderEliminarExcelente analogía, pues en mayor o menor grado, la vida es un “rompecabezas”, donde cada pieza (por difícil que sea) tiene un espacio exacto, una razón de ser, un porqué, un motivo, que a la larga nos permite construir y disfrutar de nuestra existencia con esa coherencia y afinidad que comulga con nuestros valores, pensamientos y sentimientos.
ResponderEliminarPor lo tanto, en el “puzle” de nuestras vidas, no hay que perder el tiempo tratando de “ingresar o colocar” a esas personas que no encajan en ella.
Margarita, me encantó leerte. Y tus escritos son esas “piezas” que engarzan perfectamente en mi gusto literario, brindándome además, cultura, gozo y satisfacción.
¡Gracias por ello!
Feliz día preciosa! 🌺🌺🌺
ResponderEliminarBuen símil, la vida es un puzzle donde sus piezas son muy difíciles de encajar.
ResponderEliminarSAludos.
¡Qué bonito, Magarita! Y esconde una gran verdad. A veces crees que tu vida es un galimatías y dejas de buscar como poner orden a todo sin éxito. Pero, de repente, todo encaja, tal vez un talante nuevo... una circunstancias nuevas...
ResponderEliminarPrecioso texto.
Un besín
¡Hola! =)
ResponderEliminarBuena reflexión, y justo esta cuarentena me ha dado por hacer puzzles de 1000 piezas ^^
Besitos :P
Genial.Margarita.fantástico! Todo lo que pasa por tus manos se transforma en magia.
ResponderEliminarBuen relato y reflexión, me parece muy bonito.
ResponderEliminarBesos