A contrareloj, Primera temporada, de J.G. Chamorro & Fénix Hebrón

 

Hola amigos, hoy de nuevo, os comento una de mis lecturas. Se trata de "A contrareloj", de J.G Chamorro y Fénix Hebrón.

"El día empieza cuando me pongo el reloj"... nunca mejor dicho en estas obras. ¿Por qué hablo en plural? Porque dentro de esta novela de 342 páginas, hay siete historias, siete casos diferentes del detective Paul Davis. 

Observador, metódico, excéntrico. Paul Davis no es un detective convencional. Su trabajo es encontrar y recuperar relojes. Y lo hace muy bien. Armado siempre con su tarjeta suiza y con una despierta y viva sagacidad, resuelve los casos más escabrosos y los misterios más oscuros, superando cualquier tipo de dificultad que se presente. 

Pero comencemos... 

¿Quién es Paul Davis?

Paul es un detective muy peculiar. Todo comenzó con la idea que tuvo de "robar" un reloj. Sin embargo, cuando la empresa aseguradora de la joyería en la que perpetuó el robo, contacta con él, se abre un mundo diferente. ¿Por qué? Pues, porque Paul tiene una inteligencia y percepción especial de los detalles, y al mismo tiempo, una pasión sin igual por los relojes. Y es que no son relojes corrientes, sino marcas extraordinarias de gran valor.

Tanto es así, que Paul termina trabajando como detective de la importante aseguradora, y aquí es donde comienza la acción.  

Son casos que se dividen en varios capítulos muy cortos y de lectura muy rápida. Los dos primeros, "El caso del Bell and Ross robado" y "El reloj de la condesa", fueron escritos por Fénix Hebrón en 2011. 

Los restantes... "El comienzo", "Bienvenido a Miami", "Un Apple Watch no hace tic-tac", "El reloj de carey", y "Control de aduanas", son de Javier Gutiérrez Chamorro. 

Todos ellos guardan el patrón de thriller detectivesco con mucho ritmo. Me ha encantado leerlos, los he disfrutado muchísimo, pues era un juego. Ya sabéis... ¡Seguro que ha sido tal! ¡Oh, pues no! Al final ha sido cual!  

Me ha traído algo de nostalgia, pues me ha recordado que hacía mucho que no leía novelas de detectives. Me ha parecido muy curioso el tratamiento que se le da a cada reloj, sus particularidades, y bueno, os va a parecer exagerado, pero su propia alma. Es como si cada reloj palpitase por sí mismo. 

Los personajes magníficos, y las circunstancias de cada caso te atrapan, haciéndonos cómplices y jugando a descubrir quién es el responsable. 

Cada una de las historias es totalmente independiente de las demás. Es más, hay toda una saga de "A Contrareloj". La última de ellas, con fecha de 2020, siendo curioso como un mismo personaje puede ser llevado a la vida por autores diferentes, algo que me ha parecido muy original. 

En resumen, he disfrutado mucho de esta lectura, y ha sido un soplo de aire fresco. 

No sé si os gustan los relatos de detectives, pero si es el caso, os lo recomiendo. ¡Os va a tener enganchados!