Atrapando sueños

 

Se acerca la noche de Reyes. Hoy no sonarán tambores que alegren los pasos de aquellos que corren a vitorear a sus Majestades. No habrá desfile mágico que llene nuestras calles de serpentinas, caramelos y guirnaldas. 

Pero...

Por supuesto, que sus Majestades harán acto de presencia, como siempre lo han hecho, colándose por chimeneas y ventanas, y dejando ofrendas bajo tu árbol, o sobre tu mesa. ¿Qué más da la forma o el momento? ¿No es acaso más importante el pensar, que con todo lo que sus Majestades tienen en mente, se han acordado de ti? 

A casa han llegado antes de tiempo, y han traído bolsitas de pétalos. Dentro de cada una de ellas, han depositado un beso. Ahí estarán custodiados, espero que por poco tiempo, espero que en breve pueda soltar la cinta que los sujeta y liberarlos al viento. Espero que lleguen a corazones inquietos y corazones que también comparten anhelos y saben regalar trocitos de magia.

Una de las portadoras de esta hermosa cualidad, me hizo un hermoso regalo no hace demasiados días. 

Me regaló su tiempo, su sonrisa, me hizo confidente de retazos de su vida, me llevó a pasear al corazón mismo del hermoso bosque donde muchos sueños habitan. 

Me regaló su ilusión, me desveló sus proyectos, liberó sus sueños.

Y entre otros objetos maravillosos, me hizo entrega de tres estrellas que simbolizaban tres corazones. Me regaló prendido de un cordón, un amuleto con la fuerza del sol en su interior. Y aunque ya todo esto es muchísimo, también me entregó la sabiduría de las piedras y un objeto mágico, un atrapasueños. 

¿Conoces la leyenda que se esconde tras sus hilos?

La leyenda del atrapasueños

Lo cierto es, que este año que me acompaña, he sido receptora de tantos regalos en tan escasos días, que me siento halagada y feliz. 

No tardaré en compartir con vosotros otra entrada. Una en la que os hablaré de la magia que esconden las palabras, a través de los susurros de "El niño, el topo, el zorro, y el caballo". 

Pero hoy, juntos, atraparemos sueños, filtraremos la pesadilla de esta situación que nos aborda, y la enviaremos a un lugar donde duerma y deje de ahogarnos. Solo dejaremos prendidos de nuestros hilos, aquellos sentimientos que nos llenan por dentro. Y de esta forma, la rueda girará y tal vez, pueda ser que en lugar de pesadillas, quede sujeto flotando en la mañana, todo aquello hermoso que necesitamos sentir. 

Feliz noche del día de Reyes amigos.