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Yo te cuento

martes, 24 de noviembre de 2020

El refugio


 El viejo columpio siempre le servía de refugio en los días repletos de piedras. Hacía tanto que su padre fue al viejo trastero... Buscaba tesoros, de esos que se guardan en el tiempo. Recuerdos de cuando vivían los abuelos. Objetos que jugueteaban en el interior de los cajones de una vieja cómoda que guardaba secretos. Le gustaba detener su tiempo en el baúl de fotografías, y pasar la mano con suavidad por el estante de los objetos perdidos.

Buscó y buscó, hasta que encontró aquel trozo de madera que hizo las veces de asiento, aquél antiguo travesaño, que antaño, fue puerta. 
Con fuerte cordel , soga fina pero resistente, lo sujetó a la rama del antiguo roble centenario; ese que según algunos decían, sabía escuchar las historias, para luego envolverlas en hojas. 

Hubo de buscar en sus ramas más bajas, pues no era posible de otra forma, a pesar de los metros y metros de soga; pues eran casi tantos los metros, como las historias. 

Y allí, buscaba ella refugio en los días repletos de piedras.
 
Por el camino, gustaba de acompañarse con flores silvestres y aire fresco. Y dejaba de pensar, salvo en los colores del ocaso y en los sonidos que apenas se atrevían a hacerse sonar. 

Después, regresaba, libre de piedras y oliendo a tomillo y jara. Una sonrisa, y en la mirada, una luz estrellada. Muchas veces, llevaba en sus bolsillos alguna cosa que le había parecido hermosa para el estante de los objetos perdidos. 

Sí. Su padre siempre supo donde construir un buen refugio. Uno, que pareciese un simple columpio...


37 comentarios:

  1. Los padres a veces aciertan con sus ideas y nos dejan tesoros que son recuerdos vividos, imaginados o escuchados. Al menos el mio era así. Bello relato Margarita, un columpio puede ser un buen amigo.
    Que tengas una feliz día.

    mariarosa

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    1. Muchisimas gracias amiga mía. El mío también era así. Muchos besos 😘😘😘

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  2. No sé si este escrito será un homenaje pero lo parece. Es precioso. 💙

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    1. En realidad mi padre nunca me construyó un columpio, pero si me enseñó a construir refugios. Quizás el relato salió un día cargado de piedras. Muchos besos cariño 😘😘

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  3. Ainsss los papis, voy a llamar al mio que lo han operado del ojo, a ver como sigue. Precioso, como todo lo que escribes. 😘 😘

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  4. Has conseguido darle al relato un tono otoñal, brumoso, muy evocador. Realmente me gusta.

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  5. Tod@s necesitamos un lugar así hermoso relato gracias Margarita. :)

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  6. ¡Hola Margarita!
    Qué bonito de verdad, me ha encantado. Y la foto lo refleja todo muy bien.
    Un beso :).

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  7. Que bonito Margarita. Eres genial narrando. Saludos y abrazo amiga.

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  8. Beautiful post. Thank you for sharing.

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  9. Hola Margarita, precioso relato. Cuantos recuerdo quedan atrapados en eso viejos muebles que esta repletos de tanto secretos, y tantas vivencias.
    Me encanto. Un cariñoso abrazo.

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    1. ¡Gracias Cristina! Sí, recuerdos que a veces se cubren de polvo, pero cuando menos lo esperas... aparecen. Besos :D

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  10. Hola, como siempre precioso todo lo que escribes.

    Besos desde Promesas de Amor, nos leemos.

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  11. Holaaaa
    vaya maravilla de entrada, es que eres una artista
    te adoro, y adoro tu arte amiga
    besos ♥

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  12. Recordar lo que se amó me gusta
    pero duele en el alma
    una entrada preciosa

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  13. ¡Qué necesarios son esos refugios!
    Un beso enorme y feliz noche.

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    1. ¡Hola Rocío! ¡Muchisimas gracias! Ainss, sí que lo son. Besos :D

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  14. ¡Hola! =)
    Preciosa entrada ^^

    Besitos :P

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  15. Hola,
    Como todo lo que escribes una maravilla que nos hace pararnos a pensar.
    Besos desde Promesas de Amor, nos leemos.

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