Institución literaria "Noches del Baratillo"

 

La tarde del jueves 4 de mayo, Sevilla y la Institución Literaria Noches del Baratillo me abrieron sus brazos. Colocaron a mi alrededor sonrisas y buenos deseos, me hicieron sentir calidez e ilusión, dibujaron de colores bonitos mis letras.

Gracias de corazón.

Gracias a mis compañeras, a las que pudieron venir y a las que quisieron hacerlo y no les fue posible, aunque estuvieron presentes en mí.

Gracias a Tomás Sánchez Rubio por hacer de maestro de ceremonias y por ver en mi a esa escritora que sin ser poeta, recita versos sencillos. Gracias a Lourdes Paez, encantadora y fotógrafa de excepción.

Gracias a Ricardo Reina Martel por acompañarme y por entonar las notas de una canción muy especial junto a esa gran mujer que conocí ayer llamada Anabel Caride. Él me mostró el camino hacia esta maravillosa Institución.

Gracias a todos los presentes, incluido el peludo Sultán, no podía faltar en una tarde de cuentos, donde desnudé tanto mis raíces como mis hojas.

Agradecida por tanto

Tomás Sánchez Rubio hizo de maestro de ceremonias de forma excepcional. Gran escritor, excelente profesor y mejor persona.

Mi primera presentación en Sevilla, y además de mis cuatro obras. Feliz de ver esa sala llena.

María José Campos y María José Vico, grandes amigas desde hace tanto tiempo que se me escapa entre los dedos. Para mí, FAMILIA. Algunos otros amigos quisieron estar y no les fue posible, pero los llevé conmigo en el corazón.

Francisco Espada, un señor de los pies a la cabeza. Y Anabel Caride, una mujer con una sensibilidad muy especial. Ambos escritores.

Gracias a Lourdes Páez por las preciosas fotografías que realizó.

Anabel Caride y mi gran amigo el escritor Ricardo Reina, leyendo entre ambos "Como las notas de una canción"