Un monstruo viene a verme, Patrick Ness

 

"El monstruo apareció pasadas las doce de la noche. Como hacen todos los monstruos"

A las doce y siete minutos de la noche, Conor despierta de una pesadilla recurrente que no le deja descansar. Sus miedos se condensan en pocas imágenes, imágenes impactantes...  

 

Por todo ello, a las doce y siete minutos de la noche, Conor ha comenzado a recibir una visita muy especial. Un monstruo nacido de las mismas entrañas del gran tejo que hay frente a su ventana. Un monstruo terrorífico que le contará tres historias, tras las cuales, Conor deberá contarle una cuarta que será su realidad. 

 

 

 

Y es que Conor solo tiene trece años. Demasiado mayor para ser un niño, demasiado niño para ser un adulto... Cada mañana antes de ir a clases, atiende a su madre enferma de cáncer, responsabilizándose además de las tareas domésticas. Pero la sobre carga de responsabilidad o el exceso de trabajo se diluye en el miedo al resultado final de esa enfermedad imparable, así como a la reacción que provoca en todos, en ese sentimiento de "lástima" que hace que se sienta peor. 

 

Es una lección de vida que nos pone ante el espejo de las emociones. Una forma muy sutil además, a través de esas historias que el monstruo va contando, de hacernos reflexionar sobre el que no siempre es bueno callar, no todo es lo que parece, y a veces nos colocamos del lado que pensamos justo... sin observar las opciones.

 

¿Libro o peli? Siempre digo que primero el libro y luego la peli, aunque en este caso yo lo hice al contrario. Me encantó la interpretación cinematográfica, si bien es justo decir que hay ciertas licencias en ella, y también que eché de menos la aparición de la única amiga de Conor en el libro. 

 

Pero es fantástica y muy visual. La parte en la que el monstruo narra los cuentos es sumamente preciosa, pues lo hace a través de acuarelas, comprendiéndose al final el por qué. 

 

Con sinceridad, opino que es una joya.