Mis lecturas pendientes

 

 Hay momentos en la vida en los que sientes que la fortuna te sonríe. Notas una caricia, de las que yo llamo, por dentro. Sientes un cosquilleo, no se si son mariposas o no, solo se que se agitan pero en agradable, danzando con la misma sintonía que late tu corazón. 

Se agitan cuando tus hijos te dan besos o ríen. Notas como no dejan de moverse inquietas cuando recibes uno de esos abrazos mágicos, o escuchas una melodía que despierta tu lado sonrisa. Te hacen cosquillas cuando respiras atenta al momento, y es un momento agradable. Sientes que son regalos, satisfacciones que recibes, luz que te calma o te hace sentir la euforia de la felicidad.

¿Y qué es la felicidad?

Todo lo que te aporta un aleteo de esas mariposas interiores. A veces, el más mínimo detalle; otras sin embargo, son tan grandes que nos desbordan. 

Hoy os hablo de una de esas pequeñas, de una de esas que están ahí, y a las que yo pido su ayuda cuando un día se tiñe de oscuro. Me refiero a mis lecturas. 

Leo despacio, eso sí, disfruto leyendo. Supongo que no se puede estar en todos lados, y yo en esas cuestiones, soy inquieta. Pero cuando veo la cantidad de títulos que tengo anotados, la torre de libros en papel, la acumulación en el ebook... miro los títulos, los autores, las sinopsis... y soy feliz de que tan maravillosas historias estén aguardando. 

Sí, lo confieso, en lugar de provocarme estrés, mi lista de pendientes me produce mariposas en el estómago y en el corazón. 

¿Titulos?

"Como viento de una tierra extraña", "Corte de niebla y furia", "La sociedad de la libélula", "La falsa familia", "Loba negra", "Hijos del sol", "Aquelarre", "El nombre del viento", "La vida invisible de Addie Laure", "Una maldición oscura y solitaria", "Todas las hadas del reino", "Rebeca", "Ylandra. Tiempo de osadía", "La casa de los Principios" ... y unos treinta y cuatro más.

¿Tenéis muchos pendientes? Ya me contaréis...